El estudio nos traslada a Italia, de Milán al lago Como, para renovar los códigos de la elegancia y la feminidad al estilo de la dolce vita, con un toque de humor y siempre mucho glamour.
Este vestido corto sin mangas presenta flores bordadas contrastadas y bordes festoneados. Elegante y estructurada, puede llevarse solo o en capas con el pantalón a juego y sandalias de tacón compensado.
- Vestido corto sin mangas
- Detalles de flores de ganchillo
- Bordes y bajo festoneados
- Forro tono sobre tono
- Cierre en forma de gota abotonada en la espalda
